Poema VI

La despedida

Besos nuevos, corazón frío,

miradas que van más allá de lo lógico.

abrazos que aún no tienen ningún sentido,

pero que ponen mi corazón tibio.

Trozos de esperanza repartida,

que conducen a una súbita alegría.

Siento una pequeña y cálida luz en mi vida,

mi alma decide volver a brillar

pero aún no se lo comunica a mi pensamiento,

sabe que en busca de cualquier argumento

volverás e intentarás apagar

cualquier intención de nuevos sentimientos.

Vuelve el corazón a vivir,

ya es cálido como solía serlo.

Hoy te digo aquello que siempre quise

hace muchos años tuve un sueño,

donde alguien que no conocía me quería.

Hoy entiendo que ese sueño era un futuro

con el hombre que toda mi vida amaría.

Esperé tanto y sufrí en cada segundo

pensando que regresarías,

no me di cuenta que solamente eras una ilusión,

miles de papeles sin conexión.

Algo que en el fondo de mi corazón no quería,

que el futuro estaba a mi lado,

durmiendo conmigo.

Hoy después de tantos años

estoy lista para deshacerme de tu gris y azuloso recuerdo,

puedo decirte segura que ya no te quiero.

A través de sutiles sonidos

puedo decirte que he vivido

y al fin, niño de papel, he crecido.

Te dejo una carta junto a nuestro fin

al comienzo de un nuevo camino, junto con aquel que dejo atrás.

Acepté que aunque no se cumplió lo que deseaba el destino

mi ruta tiene un nuevo comenzar.

Vuelve ese dulce atardecer de abril,

como aquel en que nos conocimos,

pero hoy existe alguien a quien realmente puedo abrazar.

Carola... y este es el ultimo..